¿Quieres ver que, aunque sabes montar en bici hasta dormido, en cuanto te cambian algo tan sencillo como la dirección, no sabes andar ni un metro?.
Esta es la Bici Loca. Un sencillo engranaje une dos pipas de dirección, de modo que, cuando la dirección gira a la izquierda, la rueda gira a la derecha. Tan simple como sencillo.
Tan increíble, como cierto.
Pero no imposible. Seguro que tu puedes hacerlo.
Desde aquí, lanzo el reto.
Si te crees capacitado para rodar con ella, sin poner los pies en el suelo, durante 2 metros, serás el feliz poseedor de un billete de 50 euros de curso legal.
El encargo, de esta maravillosa locura, ha venido de un canal estatal de TV, de divulgación científica. Cuestiones de respeto, me impiden decir cual es, de momento.
Y La Morsa se puso feliz de ello.
Esta es la Morsa 10. Nuevamente, algo especial.
La Bici Loca y yo, lo celebraremos y tú pasarás a la historia de los cerebros relajados.
Si te parece interesante, pásalo.
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